12.31.2006

Noche vieja 2006

Les deseo a todos los lectores accidentales de mi bitácora y a los pocos que siempre llegan, creo que solamente hay una, que se cumplan todos sus deseos siempre que les convenga. Tal vez así la suerte nos llegue a todos.
Esta noche hemos podido traer a mi padre del hospital, lo cual me alegró mucho. A pesar de que nos tenemos que enfrentar a muchas cosas por la enfermedad que le han descubierto en sus pulmones, creo que en pocos meses lograré llevarlo a San José.
Como no había preparado nada para la cena del 31 y todavía era temprano cuando mi padre llegó a casa, me dirigí al supermercado asiático más cercano y decidí que lo mejor era preparar unos fideos chinos para celebrar el año nuevo. Los chinos preparan lo mein, o lo que se conoce en Costa Rica y en otros países latinoamericanos como chop suey, para el año nuevo chino porque la longitud de los fideos augura una larga vida para sus comensales, lo cual dentro de las circunstancias que atraviesa mi padre me pareció que nos podría ayudar.
La presencia de mi padre en la casa me inspiró a cocinar con más ganas esta noche, a afilar mis cuchillos, a cortar más cuidadosamente la pechuga de pollo, el lomito de cerdo, el lomo de res, la zanahoria, el apio, el chile dulce, los hongos, la cebolla verde, el ajo, el culantro y el gengibre, a recordar los sabores de los restaurantes chinos que visitamos cuando era niño y adolescente y a incorporar los sabores de las culturas del sudeste asiático, sobre todo la vietnamesa y la tailandesa, que he experimentado en Seattle, cuando hice la salsa con shoyu (soya), caldo de pollo, miel, salsa de ostiones, ajo, gengibre, cebolla verde, nam pla (salsa de pescado) y jugo de limón.
Conseguí mi objetivo y logre una combinación de los sabores de mi tierra con los que he experimentado aquí. Me atrevería a decir que hace mucho tiempo no lograba conjugar tan bien los sabores que combinaba en mi mente con los que quedaban en el plato.
P.D. Si alguien quiere las medidas exactas de esta receta que me escriba y se las daré con gusto.

1 comment:

Sirena said...

¿Cuándo viene don papá a nuestras tierras? ¿vas a trearlo vos? Hornea pan porque aquí en mi casa, el café se toma con un poquito de pan con mantequilla.