8.12.2007

Confesión de agosto

I

Hay días que no me atrevo a decir lo que pienso ni lo que siento. La máquina de las palabras se me traba y no puedo hacer nada para arrancarla. Se queda la página en blanco. Las letras se esconden detrás de mi fría mirada. No sé como empezar a escribir ni como seguir levantandome a cada mañana porque me hace falta decir de vez en cuando alguna de las cosas que percibo como mis pequeñas verdades y no tengo a quien decírselo con ganas, con cigarro y trago a altas horas de la noche en la casa o en algún bar ni a quien contárselo con voz entre susurros de cómplices al oído. El mismo blues de la soledad que siempre me ha perseguido y que ahora con los años me atemoriza más porque no lo he podido vencer ni hacerlo mi amigo. Tengo miedo de no poder escoger el momento de mi muerte, que me encuentre de sorpresa, como a mi madre, solo en un país extraño sin haber dicho ni hecho nada, como una de esas piezas en una partida de ajedrez que nunca logran desplazarse de su casilla inicial, cuyo rey es víctima de un precoz y sabido fin.

II

¿Cómo haré para traerte a nuestro lado? ¿Podrás acaso sentir estas palabras estando allá y ahora tan lejos? ¿Cómo te convenzo que estas palabras son tuyas también?

III

Busco el signo que me ayude a materializar tu presencia. ¿Será tan fácil como llamarte o tan difícil como escribirte otro de esos correos que ahora no contestas.

IV

¿Me podés ayudar vos? ¿No te das cuenta que te necesito para salvarnos?

8.02.2007

Franklin Chang votará por el sí

Tanto los periódicos La Nación como Al Día reportaron que Mr. Chang está a favor del TLC. Esto no le puede sorprender a nadie ya que el insigne astronauta de la NASA se formó académica y profesionalmente en los Estados Unidos.

Lo más interesante es que afirma cosas como:
  • "Creo que el TLC traerá muchos más beneficios que consecuencias." (Al Día),

  • "El país se puede salir en cualquier momento del TLC. Vale la pena hacer la prueba y, si no queda bien, nos salimos, pero no podemos hacerlo en reversa." (La Nación) y

  • "El TLC es ciego. Es un instrumento de comercio exterior sin conciencia social. El país debe tener capacidad de aprovechar estas oportunidades en forma solidaria." (La Nación)
Lo primero que salta a la vista es el carácter superficial de estas afirmaciones, diríamos casi de campaña publicitaria, lo cual llama la atención viniendo de alguien que es un científico. Algo más específico iría más con este tipo de profesional.

Se me ocurre que Mr. Chang nos debería contar quienes van a disfrutar de los beneficios y quienes van a pagar las consecuencias o si el cuento va a ser como en Chile, México y el resto de América Central donde los empresarios nacionales y extranjeros son los beneficiados y la clase media y trabajadora son los condenados, digo los que pagan las consecuencias. A los empresarios, como ahora lo es Mr. Chang, les encanta el TLC porque permite el libre intercambio de mercancías entre países, lo cual beneficia cualquier negocio y que eso sea bueno para ellos, no significa que lo sea para el resto de la población, a pesar de que este sea el dogma oficial del FMI y del Banco Mundial

Sí, es cierto que Costa Rica se puede salir del TLC siempre y cuando tenga los fondos, que sea capaz de indemnizar a las empresas extranjeras de las perdidas de sus inversiones en el país, lo cual si se toma en cuenta las necesidades económicas de nuestro país sería una propuesta compleja y muy cara.

¿Qué le hace creer a este señor que nuestro país será capaz de utilizar un instrumento netamente comercial en uno de carácter social? Es irresponsable sugerir esta posibilidad cuando países con más recursos, a todo nivel, que el nuestro (Argentina, México) no pudieron hacerlo.

Chang dijo "Lo que quiero es instar a los ticos a que estudien el tema y no dejar influenciarse." (La Nación). Quizá esto fue lo mejor que dijo y ésto es lo mejor que podemos hacer ya que el futuro del país se debe basar en algo más que una corazonada de un astronauta de otro país, en algo más que escoger la menos fea de las posibilidades. Nuestro país merece algo mejor.